NIÑO SANDÍA

Me tomo un Niño Sandía mientras escucho"SOS tan fashion" de Kevin Johansen y dejo el tiempo pasar acordándome de Julio Camba, Josep Pla, Feliciano Fidalgo y Ramón de España.
Ingredientes:

Sandía
Limoncello
Malibú
Zumo de mango
Zumo de maracuyá

Hubo un tiempo que creí que se podía ser creativo y obrero. Es decir, uno podía cargar sacos y tener un grupo y triunfar. Otro podía lavar platos y escribir y publicar y dar conferencias. Ahora, sé que eso es falso y si eres obrero eres obrero y punto. La creación con mayúsculas es cosa de los profesionales. Queda el entretenimiento y el observar la vida pasar, eso sí.

Hoy, como pasar un verano diferente: Se celebran los siete años de la estancia de Mohamed Atta en Cataluña (del 9 al 17 de julio). No lo he visto reflejado en ningun medio. Teniendo en cuenta que Mohamed Atta inauguró (en mi opinión) el siglo XXI, una ruta Atta para pasar un verano diferente no estaría de más. Atta y su colega Ramzi Binalshibh pasaron algunas noches en Cataluña. La ruta empieza con una noche en la habitación 206 del hotel Sant Jordi de Tarragona, sigue con una noche en la habitación 512 del Casablanca Playa de Salou y termina con una noche en la habitación número 15 en el Montsant de Vilaseca. Estas habitaciones tendría que tenerlas reservadas la Generalitat para hacer una ruta Atta para todos los institutos pero no creo que lo hagan.

Y mientras hacemos la ruta Atta los franceses celebran en París el 14 de julio con tanques, aviones e infantería...sin complejos. No me quedé en la cama igual porque llegué por la mañana (como siempre) y fui al primer desfile militar de mi vida. El metro me acercó a la plaza Concorde. Todo el mundo se bajó allí y no se podía avanzar ni retroceder. Dentro del metro la policía pedía el carnet sólo a los de aspecto árabe. Después las calles se convirtieron en un laberinto por el que podías avanzar pero después no te dejaban recular. Terminé con una rápida visita a la Bastilla también llena de gente. A mí me da la impresión que los franceses obviamente siguen siendo más patrióticos que los españoles por motivos evidentes, pero algo se debe haber perdido en el camino. Muchas masas pero pocos aplausos (pensé... y me alegré).