lunes, 31 de agosto de 2009

NEGRONI (en el Caffè della Pusterla)


Stendhal (1783-1842).

Caffè della Pusterla.

Fabrizio de André (1940-1999).

Cuando me desperté, por la tarde en el Ibis de Milán, tenía dos opciones: irme a correr a Porta Venezia (como de costumbre) o irme a tomar un negroni al Caffè della Pusterla (Via Edmondo de Amicis, 24; metro S. Ambrogio). El poder del placer venció.
Así que me planté en uno de los más famosos y populares cafés milaneses (desde principios de los ochenta), escuchando en mi ipod Il gorilla de Fabrizio de André.
Negroni...Recordemos: 1/3 de vermut rojo, 1/3 de Campari, 1/3 de ginebra. Dicen que fue creado en los años 20 por Fosco Scarselli en el Caffè Casoni de Florencia y le puso el nombre de su mejor cliente: el Conde Camillo Negroni.
Milán y agosto son una combinación que recuerda a la Barcelona veraniega y vacía (hasta 1986). Pero el Caffè della Pusterla apareció ante mis ojos llena de gentes de las más diversas edades (estudiantes, profesionales)... todos, aparentemente, milaneses. En todo caso, no es un local turístico.
El Caffè della Pusterla está situado al lado de una puerta menor que permitía la entrada a la antigua ciudad medieval de Milán (zona Ticinese). En realidad, el Caffè della Pusterla es una antigua casa blanquísima inmersa en el verde. Es indudable que es uno de esos locales donde te sientes cómodo, con personalidad única y donde no hay sitio para la banalidad (todo parece tener un porque) ni para las falsas pretensiones. Un local donde desayunar, almorzar, tomar cócteles...
Mientras bebía el Negroni tuve tiempo para acordarme del "milanés" Stendhal. Este mes de agosto releí La cartuja de Parma. Relectura con sabor a lectura, pues no me acordaba de prácticamente nada. Lo disfruté como auténtica novedad, no creo que sea la única persona a la que le sucede esto. Algun día alguien debería de reflexionar sobre aquello que hicimos pero olvidamos proporcionándonos el poder del placer de la novedad y la insatisfacción del no asimilar prácticamente nada. Dicen que Stendhal escribió en un mes La cartuja de Parma. Increíble.¡Brindo por Fabrizio del Dongo, Clelia y la Duquesa de Sanseverino!

1 comentario:

jordi dijo...

Pues a parte del duomo y el castillo sforcesco, Mila no me gusta nada. Pero deduzco por tu blog que hay cosas interesantes. Tengo que cambiar de guia :-). Gracias por tu felicitacion. Pto